La relación de Hamilton con el mundo del cine ha evolucionado lo largo de los años. Comenzó en 1932 en El expreso de Shanghái. Desde entonces, los relojes Hamilton han aparecido en más de 500 películas y programas de televisión. Ahora la marca anuncia una colaboración realmente especial con Janie Bryant –la reconocida y multipremiada diseñadora de vestuarios en producciones como Mad Men, Deadwood y Why Women Kill–, para transformar tres emblemáticas piezas de la marca y dar vida a Hamilton x Janie Bryant, una colección cápsula de relojes para las mujeres de hoy y de mañana.

“En el cine, utilizamos la moda para establecer el escenario de una narración y la personalidad de un personaje antes incluso de conocer el guión. Esta colección cápsula lleva esa expresión dinámica fuera de la pantalla con relojes que reinterpretan la relación entre el pasado, el presente y el futuro”. Janie Bryant

Hamilton x Janie Bryant, relojes que cuentan una historia

La colaboración con Janie tiene mucho que ver con el concepto de relojería que tiene Hamilton, así lo define su CEO, Vivian Stauffer: “Para nosotros, los relojes hacen mucho más que indicarnos la hora: cuentan una historia del pasado, del presente y del futuro. Nuestra asociación con Janie ha sido una oportunidad increíble para renovar nuestra selección icónica que mira hacia el mañana sin olvidar el ayer. Al contemplar nuestro legado desde una nueva perspectiva, hemos creado una verdadera cápsula del tiempo para la muñeca”.

 

Los modelos del presente en esta colección

Para los relojes que representan el presente en Hamilton x Janie Bryant, la diseñadora eligió colores sutiles, texturas suaves y tonos cálidos. No podían faltar, por supuesto, los detalles con diamantes, el PVD oro amarillo claro y la piel color rosa, encapsulando un toque de glamour al estilo Hollywood. Sin embargo, elementos sutiles como las formas redondeadas y los tonos apagados les otorgan un aspecto que se siente accesible y real. Janie también intervino al deportivo Intra-Matic Automatic Chronograph y le dio un aspecto más suave, combinando sus prácticas funciones de cronómetro con unas delicadas manecillas recubiertas en PVD de oro beige y una correa de cuero de color rosa de tacto suave. Este reloj inspirado en el año 1968 es sumamente versátil. Presentado originalmente en 1937, el  reloj Ardmore Quartz de estilo Art Déco, ahora se presenta en colores neutros y texturas atractivas. Su carátula opalina de color blanco-plateado es la pieza central perfecta para su caja color oro amarillo claro suave y los detalles de la carátula. Se complemente con una correa de piel de imitación de cocodrilo de color blanco. El otro integrante de esta colección es el Lady Hamilton Vintage Quartz. Tiene una carátula negra con cepillado de rayos de sol en la que hacen un brillante contraste los diamantes. Janie logró equilibrar el atractivo vintage inherente al reloj —ya que su diseño original es los años cincuenta– con un toque de fantasía. Una caja de color ciruela intenso confiere a este reloj una personalidad atractiva y sutilmente única.

Los modelos que retratan el futuro

Mientras que las piezas del presente son sobrias y discretas, las que Bryant creó para representar el futuro brillan con fuerza. En ellas empleó correas de piel metalizadas, y sobresalen las texturas suaves y los tonos fríos. Con una magnífica correa de piel dorada a juego con las brillantes subesferas doradas, el Intra-Matic Automatic Chronograph nos guía hacia el futuro. Combinados con una carátula negra, los colores metálicos son un auténtica celebración de la innovación. Janie da al sofisticado reloj Ardmore Quartz un brillo deslumbrante con una correa de piel plateada metalizada. Una caja y una carátula plateadas clásicas y pulidas compensan el brillo de la pieza para conseguir un aspecto refinado y alegre al mismo tiempo. El delicado Lady Hamilton Vintage Quartz abre paso a lo desconocido con una carátula plateada de rayos de sol adornada con círculos de oro amarillo en tu muñeca. Un brazalete de cadena con revestimiento de PVD negro complementa el centro lleno de sombras, de nuevo con una mezcla cuidadosamente seleccionada de pragmatismo y encanto para el día o la noche.