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La colección Commander fue creada e introducida en 1959 por lo que sus 61 años son símbolo de experiencia y de atemporalidad total. Pero eso no quiere decir que no continúe evolucionando y la estética del Commander Gradient da cuenta de lo anterior.
Mido Commander Gradient deja en claro que la estética y la mecánica no están peleadas. Por ello crea una fusión y las ofrece en sintonía a partir de su icónico Commander. En esta pieza no hay carátula de color no hay barreras basta el misterio de un velo transparente para admirar la precisión de aquello que nos da la lectura del tiempo. Con el Commander Gradient la mecánica de la relojería se hace visible gracias a una carátula de acrílico transparente la primera en esta colección icónica. Como tal los componentes del Calibre 80 se pueden admirar en el lado de la carátula así como en la parte posterior gracias a una tapa transparente. Adornado con un efecto ahumado degradado original la carátula se vuelve cada vez más opaca alrededor de los bordes mientras que el fechador a las 3 en punto se destaca perfectamente contra el fondo blanco de la abertura.